La ponencia es del senador Carlos Ferro. Pasó en primer debate con ponencia positiva el proyecto de Ley 98 de 2007 de Senado, que tiene por fin declarar como tradición los juegos de calle y rondas infantiles, que representan la expresión cultural y lúdica de las diferentes comunidades del pueblo colombiano.
Bogotá D.C., 13 de diciembre de 2007. El senador Carlos Ferro dio ponencia positiva al proyecto de ley que declara los juegos tradicionales y las rondas infantiles, como una expresión cultural y lúdica tradicional que existen en las diferentes regiones del país. Ferro Solanilla aseguró: “Este proyecto lo que pretende es rescatar la identidad que se ha perdido a través del tiempo en la sociedad colombiana demostrando que los juegos tradicionales de la calle y rondas infantiles hacen parte de esa identidad nacional que se debe preservar y prolongar generación tras generación”. Esos juegos que un día practicamos todos en las calles de nuestros barrios como trompo, yoyo, golosa, lazo, carrito de balineras, zancos, aro, cien pies, vara de premio, catapiz, perinola, mataculín, pizingaña, escondidas, canicas, encostalados, pañuelito, muñequero, catarpila, cometa, diábolo, columpio, veleta, entre mucho más, son parte de la historia y tradición colombiana que han marcado las generaciones Este proyecto, que pasa ahora a debate a la plenaria del Senado, entra a competir legalmente con el Nintendo, el X-Box, el Wii y Play Station, que son los juegos de las nuevas generaciones, pero que no superan los juegos tradicionales que además de divertir, permiten la actividad física y la integración familiar o social.
Bogotá D.C., 13 de diciembre de 2007. El senador Carlos Ferro dio ponencia positiva al proyecto de ley que declara los juegos tradicionales y las rondas infantiles, como una expresión cultural y lúdica tradicional que existen en las diferentes regiones del país. Ferro Solanilla aseguró: “Este proyecto lo que pretende es rescatar la identidad que se ha perdido a través del tiempo en la sociedad colombiana demostrando que los juegos tradicionales de la calle y rondas infantiles hacen parte de esa identidad nacional que se debe preservar y prolongar generación tras generación”. Esos juegos que un día practicamos todos en las calles de nuestros barrios como trompo, yoyo, golosa, lazo, carrito de balineras, zancos, aro, cien pies, vara de premio, catapiz, perinola, mataculín, pizingaña, escondidas, canicas, encostalados, pañuelito, muñequero, catarpila, cometa, diábolo, columpio, veleta, entre mucho más, son parte de la historia y tradición colombiana que han marcado las generaciones Este proyecto, que pasa ahora a debate a la plenaria del Senado, entra a competir legalmente con el Nintendo, el X-Box, el Wii y Play Station, que son los juegos de las nuevas generaciones, pero que no superan los juegos tradicionales que además de divertir, permiten la actividad física y la integración familiar o social.
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